Además de que costará más este combustible al autotransporte, la falta de parque vehicular más actual, rezaga su introducción.
La incorporación del diesel de ultra bajo azufre (UBA) en las gasolineras del país, provocará en el autotransporte un fuerte impacto por su alto costo comparado con el combustible actual.
Al respecto, diversos institutos gubernamentales y privados, para hacer menos fuerte los gastos del combustible en las unidades, trabajan en difundir sus ventajas y beneficios.
En este sentido, Bernardo Baranda Sepúlveda, director general del Instituto para el Transporte y Desarrollo de Políticas (ITDP) en México, estimó que la aplicación de este diesel requiere de un largo proceso en el cual se deben de exponer los beneficios de contar con nuevas tecnologías.
“Por ejemplo, en el caso del corredor Metrobús Insurgentes, los propietarios de los autobuses están concientes de que adquirir nuevas tecnologías representa ahorros importantes en los gastos operativos”, resaltó.
Para el segmento de transporte de carga, el directivo propuso establecer alianzas con asociaciones e instancias gubernamentales capaces de brindar incentivos que puedan procurar una mejor tecnología con beneficios de rentabilidad y rendimiento en los motores.
Destacó que organismos como la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP) buscan sensibilizar en el tema al gremio, aunque el objetivo es difundir los beneficios hacia el hombre-camión y las micro y pequeñas empresas.