Aunque siguen siendo el talón de Aquiles de la industria e impacta seriamente en la renovación, empresarios del transporte se mantienen firmes en sus inversiones.
De acuerdo con Fernando Rodríguez Camacho, presidente de la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), sólo el año pasado se sumaron alrededor de 25 mil autobuses de dudosa procedencia a los 100 mil que se tienen previstos circulando en territorio nacional.
“Lamentablemente los tenemos en todas las rutas de todo el país, básicamente destacan en los estados de la frontera y centro”, dijo.
Lamentó que hayan proliferado este tipo de vehículos, pues el decreto que las está regularizando ha creado un desconcierto y descontento entre los transportistas porque al final de cuentas el esfuerzo por renovar sus unidades se ve truncado.
De hecho, según datos de la Administración General de Aduanas, a partir de la emisión en octubre pasado del decreto de importación de vehículos usados provenientes del vecino país del norte, hasta los primeros meses del 2006 se ubican regularizados alrededor de 290 mil unidades.
Ello, de manera general (autos, autobuses y camiones de carga), provocará que sólo durante este año se regularicen cerca de 700 mil vehículos “chocolate”, informó la dependencia.
No obstante esa situación, el presidente de la Canapat explicó que aún no se visualizan cierres de empresas, aunque sí hay bajas de ocupaciones, dado que ofertan el precio hasta en un 50 por ciento menos que una tarifa normal.
“Esa baja en las tarifas tiene que ver porque no se paga un seguro, no tienen una infraestructura que les este generando un costo, esa es la realidad, ahí abaratan mucho y viven al día”, comentó.
De hecho, destacó el representante de los transportistas de pasaje y turismo, las empresas afiliadas a la Canapat tienen más de un año sin incrementos en las tarifas, ya que la idea es cuidar los costos y no se refleje hacia los usuarios.
Al respecto, José Antonio Muñiz, director adjunto del Grupo ADO, destacó que el mercado más afectado por la entrada de los vehículos ilegales es el pasaje regular, donde se manejan los tramos cortos y los intermedios, segmento que refleja mayor demanda.
El directivo mencionó que a nivel nacional predomina una flota para este servicio de aproximadamente 40 mil unidades, mismas que sí cuentan con todos los elementos de una empresa formal, como es el seguro de viajero, pago de impuestos y seguro social, entre otros.
Bajas en la renovación
Además del impacto en las tarifas, la renovación de unidades también refleja una baja considerable a consecuencia de los llamados vehículos irregulares, pues a decir del presidente de la Canapat, los primeros meses del año aún se mantienen estáticos con relación al 2005.
“Hasta el año pasado traíamos todavía un buen ritmo, ahora no ha sido tan favorable. Esto, debido a que muchos transportistas, principalmente los hombre-camión, con la legalización de los vehículos irregulares ven la oportunidad de mantener sus vehículos viejos e inseguros y por tanto no los chatarrizan y los cambian por nuevos.
Destacó que sólo en el 2005 se renovaron alrededor de 1,700 unidades del tipo en el país, cantidad que aun es baja comparado con las 5 mil que se requieren cambiar por año.
No obstante, dijo, los integrantes de la Canapat continuarán en pláticas con las autoridades correspondientes para seguir buscando alternativas que faciliten créditos y sume por lo menos una empresa chatarrizadora a las dos ya existentes en territorio nacional.
“Esperemos que el resto del año mejore el panorama y las empresas se den cuenta de la importancia de cambiar sus unidades viejas por nuevas”, recalcó.
Más inversiones
Si bien la mayoría de las empresas pertenecientes al sector resienten la regularización de vehículos ilegales, algunas se mantienen firmes en sus inversiones.
Como ejemplo, Ómnibus de México, empresa que el año pasado registró números rojos, para combatir la competencia desleal, en los próximos meses seguirá con su plan de expansión, el cual incluye la renovación de por lo menos 120 unidades, y añadirá otras 250 a su flota vehicular, informó Arturo Alcántara Rojas, presidente de la firma.
“En el caso de Ómnibus de México constantemente estamos renovando, ya que la idea es tener una flota con una antigüedad de siete años. Por ello, permanentemente se están renovando los autobuses”, manifestó.
Asimismo, hizo énfasis en la adición de cuatro nuevas terminales en el país, lo que reflejará un incremento de 25 por ciento en el desarrollo de la empresa de transporte con relación al año pasado.
También, añadió, Ómnibus de México estima abrir una plaza cada mes en el servicio transfronterizo. “La meta de inicio es llegar a 45 puntos de origen-destino (Estados Unidos-México), por ahora sólo predominan 16 y se cuenta con cerca de 150 unidades de servicio local en el vecino país del norte y 45 que cruzan la frontera.