En México, los accidentes de tránsito le cuestan al país 150 mmdp, cifra equivalente a 1.7% del Producto Interno Bruto (PIB), además afecta la productividad, provoca daños materiales y demanda atención médica y hospitalaria, esto de acuerdo con el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (Conapra).
Para disminuir el riesgo de mortandad; sociedad civil, organizaciones y especialistas en temas de transporte y seguridad vial, decidieron impulsar la Ley General de Seguridad Vial, la cual podría estar lista a finales del presente año.
ANTECEDENTES
Históricamente nuestro país ha permitido tener un reglamento de tránsito por municipio, lo que supone cientos de estatutos a nivel nacional, con disparidades interesantes, es decir que un mismo riesgo se califica de manera distinta en Guanajuato, Guadalajara o Zacatecas, y lo que es muy penado en una localidad, en otra sólo amerita una multa de un salario mínimo.
“Hace 20 años tuvimos la visión de regular este problema y realizamos algunos intentos, pero carecíamos de los contactos y la oportunidad política para impulsar una Ley General en la materia. En 2012, cuando creamos el Observatorio Vial, nos dimos a la tarea de revisar los reglamentos de tránsito y conocer las deficiencias que hay en el sector, señaló Miguel Guzmán Negrete, director de Seguridad Vial de Cesvi México.
Agregó que luego de dos décadas, el tema de seguridad vial fue madurando hasta alcanzar el interés de diversos actores de la política, así como de la sociedad civil, lo que permitirá establecer programas para la prevención de accidentes.
“En 2018, la iniciativa comenzó a tomar forma en el Senado de la República, después pasó a la Cámara de Diputados, donde más de 100 funcionarios se convencieron de la importancia de esta ley y, más tarde, se realizaron ocho foros regionales de Seguridad Vial con la participación de secretarios de movilidad, cámaras, asociaciones, sociedad civil y personas interesadas en el tema”, refirió.
CINCO PILARES
A decir de Guzmán Negrete, parte de los ejes prioritarios se centran en la gestión de la seguridad vial, mediante la regulación de mecanismos adecuados para la emisión de licencias de conducir donde los interesados deberán aprobar un examen de valoración psicofísica integral, un examen teórico y práctico de conocimientos y habilidades necesarias.
En sus estatutos, la Ley General de Seguridad Vial busca priorizar en temas de gestión mediante el impulso a la ISO 39001, publicada en octubre de 2012 para apoyar la Década de Acción para la Seguridad Vial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), como una de las acciones para la prevención de accidentes.
Asimismo, propone la creación de una normativa segura bajo los estándares WP19 para tener vehículos seguros, y dejar de instalar solo sistemas básicos en los automóviles.
Dijo que también se contempla el desarrollo de campañas de prevención de accidentes por parte del gobierno, a fin de promover infraestructura segura que facilite priorizar proyectos carreteros y evitar errores en su diseño.
El quinto tema, explicó, es la atención prehospitalaria, una vez que el 50% de las personas con lesiones graves mueren durante el trayecto.
ISO 39001
De acuerdo con Miguel Guzmán, la implementación de un sistema de gestión de la seguridad vial basado en esta norma de carácter internacional permite a las compañías transportistas reducir el número de personas muertas y heridas graves, derivadas de los accidentes de tránsito.
“En 2014 fuimos la primera empresa en México en recibir el certificado ISO 39001:2012 por cumplir con el Sistema de Gestión de la Seguridad Vial dentro de nuestra organización, a partir de esa fecha asesoramos a las empresas transportistas mediante consultoría y el servicio de Plan Integral de Seguridad Vial que facilite a las compañías alcanzar su objetivo”, apuntó.
Dicho proyecto fue diseñado para reducir las pérdidas económicas de la empresa, producto de la siniestralidad en sus flotillas y tiene como principal objetivo modificar la prevención de accidentes y reducir los factores de riesgo que están en manos del conductor.
Apuntó que en México no menos de 10 empresas se han certificado bajo esta normativa, entre las que destacan: Grupo Bimbo, Coca Cola Femsa, TDR Soluciones Logísticas y Senda.
“Agregar este tipo de sistemas, permite disminuir hasta en 30% la siniestralidad en empresas transportistas”, destacó.
Cabe mencionar que Cesvi México también contribuye en la investigación de accidentes que revelen su causa y cómo prevenirlos. “Hacemos la inspección de siniestros muy puntuales como son los casos de la operadora de EASO, la pipa de Xalostoc, o el BMW en Paseo de la Reforma. Por ello, para mantener la confianza y credibilidad de los clientes tenemos a nuestros peritos altamente capacitados para diagnosticar las causas del percance”, apuntó.
Reiteró que no se trata de culpar al operador, “algunos conductores alegan quedarse sin frenos, y cuando se hace el análisis, se puede ver que el vehículo está diseñado para transitar en Europa, en otros casos, le faltan componentes que no trae o que fueron quitados para ahorrar dinero, lo que conlleva a un grave riesgo para su circulación”.