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Falta mucho por recorrer

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A un año de haber iniciado sus operaciones, el Metrobús ha logrado los siguientes resultados: consolidarse como el primer corredor de transporte confinado de la ciudad de México, la movilización de 70 millones de usuarios, reducir en 33 por ciento el tiempo de trabajo de éstos y disminuir la emisión de 35 mil toneladas de gases de efecto invernadero.
Al respecto, el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Ricardo Ruiz Suárez, al inaugurar la exposición fotográfica: Metrobús: en la ruta correcta, realizada con motivo del primer aniversario de este sistema, comentó que el Metrobús es percibido entre la ciudadanía como un medio eficiente, cómodo y que le ha permitido acceder a una vida cotidiana digna

En un año, este sistema de transporte ha vivido un proceso amplio, en donde ha permeado la idea de establecer un concepto que mejore el entorno urbano y ambiental, a través de una reducción de la emisión de contaminantes.

En este sentido, el director general del Metrobús, Guillermo Calderón Aguilera, explicó que un estudio realizado por el Instituto Nacional de Ecología (INE) y por el Centro de Transporte Sustentable (CTS) y apoyado por el Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés) arrojó que los componentes, partículas suspendidas totales, CO2 y fundamentalmente Benceno, por el riesgo que tiene a la salud, el Metrobús tiene una exposición menor del 50 por ciento respecto a los autobuses convencionales, a los microbuses y a los articulados.

Así pues, resulta oportuno recordar algunos de los planteamientos del Programa de Introducción de Políticas y Medidas de Transporte Amigables con el Clima en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México cuyo propósito es contribuir al desarrollo de políticas y medidas que permitan, a largo plazo, la sustitución modal de transporte hacia tecnologías más eficientes y menos contaminantes.

Este programa pretende lograr, a través de la construcción de corredores de transporte, una mejor movilidad para los habitantes de la Ciudad de México, operando en ellos la tecnologia de autobuses más adecuadas en función del costo-efectividad resultante de la evaluación, no sólo ambiental sino operativa de las mismas.

Por supuesto, las diferentes tecnologías que pueden aplicarse en el transporte urbano de pasajeros, por ejemplo: diesel bajo en azufre (15 y 50 ppm), híbridos (diesel-eléctricos), gas natural y eléctricos son opciones interesantes para la capital del país, pero son insufientes, debido, principalmente, a que el problema del transporte debe atacarse en forma metropolitana, integral, multimodal y a largo plazo, por lo menos para los próximos 20 años.

Hay que reconocer que falta mucho camino por recorrer. El Metrobús es sólo un ejemplo de los beneficios que aporta este tipo de transporte, sin embargo, es indispensable organizarlo en un contexto que tome en cuenta la modernización del Metro, como eje rector del transporte urbano, conjuntamente con los trolebuses y el tren ligero, con el objetivo de garantizar un sistema metropolitano eficiente, económico, seguro, rentable y ecológico.

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