Con una inversión de 56 mil millones de pesos, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval Díaz, pusieron en marcha el Macrolibramiento y el Tren Eléctrico, ambos ubicados en Guadalajara.
El Tren Eléctrico cuenta con 23 kilómetros de longitud, mientras que el Macrolibramiento, con 111 kilómetros de longitud y una sección transversal de 22 metros de ancho para alojar dos carriles de circulación por sentido, es hasta ahora el segundo más grande de la zona metropolitana del país, luego del Arco Norte de la Ciudad de México.
A partir de su puesta en funcionamiento la vía tendrá un aforo diario de casi seis mil vehículos, por lo que beneficiará a más de 4 millones y medio de habitantes de la zona metropolitana, ya que dará conexión a las autopistas México-Guadalajara, Guadalajara-Colima y la Guadalajara-Tepic.
Además de evitar el tráfico de largo itinerario en la zona metropolitana de Guadalajara, el macrolibramiento agilizará la conexión de los Corredores Carreteros México-Nogales con ramal a Tijuana y Manzanillo-Tampico con ramal a Lázaro Cárdenas.
El uso de esta vía representará un ahorro en costos de operación y tiempo de traslado en recorridos de largo itinerario, con lo que se mejorará la competitividad de la región, se desahogará el tráfico y mejorará la calidad de vida de los usuarios.
La obra fomenta a su vez el desarrollo de plantas industriales, centros logísticos; así como la distribución de personas y bienes, que contribuirán a la actividad económica, el empleo y la competitividad de la región occidente del país.
El libramiento que llevó más de cinco años en construcción generó casi 7 mil empleos directos e indirectos durante ese periodo.
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