Con dos unidades entregadas a la empresa Total Transportation System en California, Kenworth puso a prueba su tecnología híbrida que combina el gas natural y baterías eléctricas.
“Las pruebas que compararon el camión estas unidades con un camión que usa un tren motriz de gas natural convencional mostraron una mejora del 23% en la economía de combustible y una reducción del 18% en las emisiones de CO2”, aseguró la firma.
En específico, entregó dos T680 con cabina diurna con tecnología cero emisiones de segunda generación con el que tienen un rango extendido.
Los dos vehículos utilizan el motor de emisiones Cummins Westport L9N Near Zero (NZ) alimentado por gas natural comprimido (GNC) que impulsa un generador para extender la autonomía de la batería del camión.
El camión usa baterías de iones de litio para lograr su rango de cero emisiones y para complementar la energía del generador al subir pendientes.
Este sistema está hecho para que la energía generada por el motor y el sistema de frenado regenerativo se aplique de manera adecuada a través del motor eléctrico, ahorrando consumo de combustible.
La armadora asegura que “pueden funcionar en modo de emisiones cero con baterías durante 30 millas y éstas pueden recargarse utilizando un generador alimentado por un motor de gas natural con emisiones cercanas a cero”.
Las unidades T680 fueron desarrolladas para explorar y evaluar nuevas alternativas para el diésel en unidades Clase 8.
“Ofrecen una solución excelente para las regulaciones locales de aire limpio en aplicaciones regionales y de acarreo, al tiempo que brindan el rendimiento de Kenworth que esperan nuestros clientes”, señaló Brian Lindgren, director de investigación y desarrollo de Kenworth.
Los camiones fueron construidos bajo un proyecto financiado por California Climate Investments y el Fondo de Reducción de Gases de Efecto Invernadero (GGRF).