La van eléctrica de Mercedes Benz, la eSprinter, fue puesta a prueba en el circulo polar Ártico, la cual tuvo la finalidad de mostrar la fiabilidad de la unidad aún en condiciones extremas y a pesar de su propulsor ecológico.
Las pruebas se hicieron en Arjeplog. Suecia, con temperaturas que estaban por debajo de los menos 30 grados, en carreteras heladas y con nieve profunda para poner a prueba el comportamiento del arranque, la resistencia las bajas temperaturas por parte de los componentes, el software, las interfaces y las baterías.
La empresa de la estrella señala que la eSprinter se mostró apta ante las dificultades y asegura que incluso con estas condiciones desfavorables tuvo una autonomía de mil kilómetros con una batería de 55 kWH.
[ngg src=”galleries” ids=”7″ display=”basic_slideshow” gallery_width=”680″ gallery_height=”450″]“Pudimos obtener información que hará que la eSprinter sea más segura y cómoda. Estamos muy orgullosos del resultado y esperamos poder ofrecer a nuestros clientes un producto extremadamente confiable muy pronto que sea más que adecuado para el uso diario, independientemente de las condiciones “, señaló Benjamin Kaehler, Director de eDrive en Vanes en Daimler AG.
Entre otras pruebas que se hicieron fueron la de bajar la ventanas a pesar del hielo que tuvieran o que la cabina se pudiera calentar lo más rápido posible y de manera confiable. Así mismo se puso en dificultades la función de carga rápida, la cual demostró una recarga del 80 por ciento en 30 minutos.
La eSprinter saldrá al mercado a mediados de 2019, estará disponible con un techo alto y un peso bruto de tres mil 500 kilogramos y su volumen de carga máximo será de 10.5m cúbicos. Tendrá una batería de 55 kWh con mil 500 kilómetros de autonomía con una carga útil de 900 kilos.