Renacimiento del ferrocarril |
Durante muchos años el transporte de pasaje en México estuvo rezagado y al margen de todo crecimiento del sector. En los últimos años, y debido a la apertura de fronteras, se dió en nuestro país un gran salto en materia de transporte de pasaje foráneo. Hoy vemos circular por las carreteras de nuestro país los más modernos autobuses para pasajeros que se fabrican en el mundo. |
Pese a ello México requiere más, mucho más, en materia de transporte de pasajeros. Cada región del país es diferente y las distancias enormes para transportarse por autobús. Tan sólo de la Ciudad de México a Tijuana se necesitan tres días. Hasta la fecha el transporte aereo sigue siendo caro y el tren ¿desapareció?
Para millones de mexicanos hasta la década de los 90’s el tren era su único medio de transporte. El transporte en las grandes ciudades no era problema ya que las condiciones eran totalmente diferentes en cuanto a su número de habitantes y las distancias a recorrer. El metro fue la solución para quienes tenían necesidad de transportarse dentro de la ciudad. Luego vino la anarquía con los microbuses y las combis.
En nuestros días el problema del transporte tiene otro nombre: “traslado masivo de pasajeros”. El exagerado crecimiento de la zona conurbada exige otras soluciones por lo que ya se comienza a vislumbrar para el futuro la existencia de trenes urbanos, suburbanos, interciudades y trenes de alta velocidad como el “tren bala” para unir grandes ciudades como el Distrito Federal con Guadalajara, Monterrey, Guadalajara, Mexicali, Tijuana, Mérida, etc.
El Ferrocarril Suburbano de la Zona Metropolitana del Valle de México será un sueño hecho realidad para millones de mexicanos que tienen su casa habitación en el norte de la zona metropolitana y su trabajo en el sur de la Ciudad de México, y que para trasladarse de un lugar a otro le quitan a su descanso dos horas por la mañana y dos horas por la tarde-noche.
Este moderno transporte masivo podrá transportar anualmente más de 100 millones de pasajeros de la Terminal Buenavista a la Estación Cuautitlán, en un recorrido de 27 km, con 7 estaciones en total, incluyendo sus dos terminales en Buenavista y Cuautitlán, lo que marcaría el renacimiento del transporte de pasajeros por ferrocarril en nuestro país.
Este Ferrocarril, es un proyecto de transporte masivo, eléctrico y no contaminante, que permitirá atender la demanda de transporte en el corredor Buenavista-Cuautitlán, que es uno de los que presentan mayor tráfico y demanda de transporte de la población y entre sus beneficios permitirá a los usuarios un ahorro de más de 2 horas diarias en tiempo de transporte al hacer el recorrido en tan sólo 25 minutos.
Este ahorro se traduce en una mejor calidad de vida para que las personas disfruten un mayor tiempo en actividades deportivas, culturales, de entretenimiento o descanso, además del beneficio de trasladarse en un transporte más seguro, cómodo, puntual y rápido.
Entre los diversos beneficios para la población en general, se encuentra la construcción de 12 pasos vehiculares, centros de transferencia modal y otras obras inducidas y de confinamiento, con una inversión de unos 2 mil 500 millones de pesos (250 mdd) que serán aplicados para confinar los servicios del Ferrocarril Suburbano, lo que además beneficiará al autotransporte público, a los automovilistas particulares y a los concesionarios del tráfico ferroviario de carga, al evitar estos cruces a nivel con el Ferrocarril. Con ello se agilizará el tráfico vehicular y se reducirán las emisiones de contaminantes al entorno ambiental, ya que el Ferrocarril es eléctrico.
La pregunta que queda en el aire es ¿Cuál será el futuro de los autobuses urbanos, suburbanos e interurbanos?