Mucho se ha dicho sobre la oportunidad que tienen las pequeñas y medianas empresas para aprovechar las ventajas del comercio exterior, y con las nuevas reglas del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la ventana es mayor siempre y cuando se cumplan con los requisitos.
Uno de los temas que más escabrosos es el tema de la corrupción y las buenas prácticas, que no tienen que ver con el cumplimiento ante el Servicio de Administración Tributario (SAT), sino con temas de inclusión, que incluyen prácticas para eliminar la discriminación, integridad, ética, etc.
“El concepto de integridad empresarial no tiene una relación directa con el tamaño de las empresas, es que los empresarios sean íntegros. La integridad debe ser un principio que deben tener todos los negocios”, afirmó José Refugio Muñoz, vicepresidente ejecutivo de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar).
Durante el webinar “La integridad empresarial como ventaja competitiva”, Carlos Villalobos Gallegos, coordinador de vinculación con el sector empresarial de la Secretaria de la Función Pública, dio conocer el Padrón de integridad empresarial, un registro voluntario donde se calificará el nivel de buenas prácticas e integridad, y el gobierno federal otorgará un distintivo de integridad empresarial, con dos años de validez.
Este distintivo les dará puntos a la hora de hacer negocios con el gobierno y para ayudarlos a integrarse a los temas de comercio exterior.
En este programa se dará asesoría para cumplir con todos los requisitos que marca el padrón. Este distintivo ayudará a simplificar los temas de licitaciones, pues aquí ya se encontrarán varios de los requisitos que se piden.
En su presentación, Villalobos explicó que este padrón está alineado a los requisitos que pide el gobierno con respecto a los capítulos del T-MEC: 13 de compras públicas y tipo de servicios para licitación, competencia sana y prácticas para eliminar la discriminación, el 25 sobre Pymes, el 26 sobre competitividad y el 27 enfocado a la corrupción.
El vocero de la SFP hizo un llamado a los transportistas para ser parte de este padrón, sin importar su tamaño.
Por su parte, Refugio Muñoz recordó que el 97.5% de sus agremiados son micro, pequeñas y medianas empresas y la idea de “darles a conocer esta iniciativa que el gobierno federal impulsa para poner una herramienta que permita abatir una de las fugas más importantes del negocio que tenemos, la cantidad de recursos que se van en temas de corrupción”.