En 1995 se inició una historia de éxito que arrancó con el modelo Sprinter, una van que hoy tiene una tercera generación e incluso una versión eléctrica y más de mil ensamblajes diferentes para todas las necesidades, de pasaje o carga.
“El secreto del éxito del Sprinter es su versatilidad, que ha sido nuestra principal prioridad junto al enfoque en la seguridad desde su lanzamiento al mercado en 1995. Gracias a su amplia gama de variantes, también es la primera opción cuando se trata de soluciones para proveedores de equipamiento”, declaró Norbert Kunz, jefe de marketing de Mercedes-Benz Sprinter.
En lo que lleva de historia, la van se conoce en 130 países con casi cuatro millones de unidades construidas y definió al segmento entre 3 y 5.5 toneladas, lo que la volvió en un vehículo pionero.
Además, “contribuyó a la transición al comercio electrónico: en un momento en que casi nadie podría haber imaginado la dimensión del comercio en línea que tenemos hoy, la marca Stuttgart presentó una furgoneta de última generación que era perfecta para los desafíos logísticos del futuro”, enfatiza la empresa.
2006, la segunda generación de la Sprinter
La segunda generación de la Sprinter, no solo llegó con mayor capacidad de carga, sino con un sistema de un resorte de lámina transversal GFRP en el eje delantero y nuevos resortes parabólicos en el eje trasero, que se complementaron con una suspensión neumática opcional.
Este sistema fue llamado Adaptive Esp y se adaptaba a diversas condiciones de carga gracias a la detección de masa y centro de gravedad y, por lo tanto, el control es más preciso y específico en situaciones críticas de conducción.
Con el paso de los años, esta tecnología se fue mejorando con nuevas implementaciones como estabilización de ramolque. Además de que en 2013 fueron agregados sistemas de asistencia al conductor.
Tercera generación que se adapta
La tercera generación de la Sprinter se ha concentrado en adaptar el confort y la seguridad de los coches de pasajeros con opciones de conectividad para la gestión de flotas, y es que se puede conocer en casi tiempo real la información del vehículo, como la ubicación, el nivel de combustible o el estado de mantenimiento.
La Sprinter puede variar en sus componente elementales de carrocerías, chasis, conceptos de transmisión, tonelajes y detalles de equipos para adaptarse a cada cliente.
Además, “en la tercera generación, también se ofrecen más opciones para el tren motriz con tracción delantera disponible por primera vez y dos transmisiones recientemente desarrolladas, como la transmisión del convertidor de par automático de 9 velocidades”, señala la empresa.
Como parte de su estrategia de eDrive @ VAN, Mercedes-Benz Vans ha establecido un ecosistema para el cambio a la movilidad eléctrica con servicios que incluyen aplicaciones y herramientas para seleccionar el vehículo y la infraestructura de carga requerida para sus nuevos clientes y determinar los perfiles de manejo y considerar el costo.
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