A fin de convertir sus activos en dinero, diversas empresas transportistas han encontrado en el mecanismo de subastas una opción para vender de forma segura su flotilla que ya cumplió su primer ciclo de vida útil, a la par, otras empresas ven en este mismo nicho la opción para adquirir un vehículo y sacarle el máximo rendimiento.
Aunque lo anterior no es exclusivo de empresas de flotillas, pues otras firmas han tenido que hacerse de recursos para solventar problemas financieros, es el caso reciente de la acerera Altos Hornos de México, quien lanzó al público en general una subasta de vehículos utilitarios, Suburban y unidades de carga, modelos 2005 hasta 2016.
Ventajas
Para Ricardo Jaime López, ejecutivo de Cuentas Corporativas en Morton, históricamente la compra de unidades mediante una subasta ha tenido mayor éxito entre pequeños transportistas y hombre-camión, ya que en diversas ocasiones, no tienen acceso a comprar un camión nuevo, derivado de los altos costos y tasas de interés.
Las empresas de mayor tamaño, explicó, son más escépticas y no están familiarizadas con las subastas sino con el método tradicional de venta, “en Morton queremos que los transportistas vean la diferencia y conozcan que las subastas son una opción para mover sus activos o adquirir bienes”.
Señaló que regularmente el precio de los vehículos que se ofertan en subastas es más atractivo y comentó que además de ofrecer unidades que ya cumplieron con su vida útil también se ponen a la venta unidades siniestradas o de pérdida total.
“Tenemos una base de 16 mil compradores, entre el ‘yonquero’, el mecánico y clientes que tienen su flota pequeña de transporte”, precisó el ejecutivo de Morton.
Desde su experiencia, Luis Castrejón Carstensen, director comercial en Subastas Ventura, compañía mexicana con más de 16 años en el mercado, precisó que a través de este tipo de venta los transportistas cuentan con la ventaja de tener diferentes opciones, para ello, han desarrollado un canal especializado en equipo pesado, donde se ofertan unidades derivadas de un siniestro o que han terminado su primer ciclo de uso activo en negocios de consumo, refresqueras, lácteos y logística, entre otros.
“Iniciamos atendiendo el mercado de aseguradoras de unidades derivadas de pérdidas totales, salvamento y hemos sido una compañía que se ha ido adaptando a las necesidades de cada sector”, señaló.
Precisó que en los últimos seis años se ha integrado el mercado de financieras de arrendadoras, “hemos ido identificado los canales y flujos operativos particulares de cada sector, analizamos las necesidades de cada cliente, desarrollamos un proceso ganador, donde buscamos la automatización, monetizar el factor humano y de esta manera, maximizar el retorno para cada sector”.
En el caso de los vehículos siniestrados, comentó, es un mercado muy peculiar, porque las unidades si bien pareciera que ya no tienen uso siguen teniendo un valor bastante alto.
Señaló que para Subastas Ventura, alrededor del 30% de compradores es el hombre-camión, 60% recicladores o clientes que se dedican a la reventa y 10% restante al despiece de unidades.
Además de las opciones privadas, también existen las subastas que realiza el Servicio de Administración Tributaria (SAT), a través de una aplicación electrónica la dependencia lleva a cabo remates de bienes embargados para que las personas interesadas puedan participar y hacer la compra a un precio por demás competitivo, asegura en su página.
Durante el periodo de remate, el usuario puede realizar ofertas de compra o mejorar las ofrecidas por otros postores, finalmente los bienes se adjudican a favor de quien haya realizado la postura más alta y se realiza el pago total.
Compras sin riesgo
En los últimos años, organizaciones delictivas han encontrado en la venta de flotillas en medios digitales un modus operandi para defraudar a compradores mediante páginas clonadas de empresas reconocidas rematan vehículos a precios muy bajos.
De acuerdo con la CONDUSEF, de 2020 a finales de 2022 se registró un total de 391 mil 182 casos por posible fraude con un marcado incremento en el fraude cibernético, derivado principalmente del aumento del comercio electrónico y transferencias vía electrónica.
José Manuel García, gerente general de V4B (Vehicles for Business), empresa perteneciente a Corporación Zapata, comentó que mediante el recurso de subastas los transportistas tienen la facilidad para modernizar o crecer su flotilla, ya que pueden maximizar sus recursos financieros evitando intermediarios y realizar compras sin algún tipo de riesgo.
“Pueden comprar en formato presencial o en línea, es un proceso ágil y confiable ya que se cuenta siempre con el respaldo y seguimiento del subastador (garantizando que la compra es legal), minimiza el riesgo de fraudes, el comprador tiene a su disposición un archivo fotográfico y descripciones precisas de las unidades, además el costo al que son adquiridas las unidades es menor al que se oferta en el mercado y las unidades están listas para operar o reacondicionar”, añadió.
Apuntó que, las unidades son compradas directamente a empresas reconocidas y confiables, “nuestros principales clientes se dedican a la compra-venta de unidades y/o a la logística y distribución”.
Manuel García, abundó que, el diferenciador de una subasta contra el mercado tradicional es que la subasta es un tipo de negocio mediante el cual se vende una gran variedad de unidades a bajos costos, de esta manera, los transportistas pueden encontrar todo tipo de vehículos con mínima inversión.
No obstante, el ejecutivo hizo un llamado a los proveedores para que confíen más en las reglas del mercado y consideren que la venta de unidades usadas a través del mercado subastador permite vender unidades rápidamente y a precios razonables.
Expectativas
Al referirse al comportamiento del mercado, Ricardo Jaime López, ejecutivo de Cuentas Corporativas en Morton, refirió que el mercado comienza a reactivarse luego de la pandemia y la escasez de unidades que afectó a la industria.
Explicó que además de las flotillas que quieren renovar su parque vehicular, también existen empresas que cierran y venden sus activos.
Hoy en día, la división especializada de Morton Subastas ofrece a empresas y particulares un medio transparente y rentable para la venta y compra de flotillas, autos clásicos, de colección y vehículos usados.
Desde su experiencia, José Manuel, gerente general de V4B, afirmó que el mercado de subastas vive uno de sus mejores años en cuanto a ingresos y venta en número de unidades.
“Consideramos que 2023 será una oportunidad para superar el crecimiento que tuvimos en 2022, es un año en el que capitalizaremos la experiencia para ofrecer subastas híbridas en las que cada participante elegirá la mejor forma para participar”, puntualizó.