Profesionalización, mejora continua y mantener óptimos niveles de actualización, además de técnicos especializados, son elementos que deben cumplir los talleres de reparación instalados en las propias empresas transportistas.
En tiempos pasados, las empresas de autotransporte, al momento de adquirir sus unidades, se enfocaban más en el producto, tanto en precio como en imagen. Hoy, frente a los grandes impactos en la operación, el servicio y mantenimiento correcto de las flotas se ha vuelto primordial durante el análisis de adquisición, con el propósito de mantener niveles óptimos de rentabilidad.
De hecho, para muchas empresas, sobre todo para aquellas que tienen grandes y medianas flotas, una de sus ventajas competitivas en el mercado es la calidad en el servicio, la cual depende, en gran medida, de tener rodando el mayor tiempo posible las unidades.
Para dar ese nivel de servicio y tener la flota siempre trabajando, actualmente son cada vez más las compañías de autotransporte que buscan tener en mejores condiciones sus vehículos, por lo cual se han dado a la tarea de buscar las diversas opciones en mantenimiento y reparación que resulten idóneas para sus negocios.
Así, algunos empresarios del autotransporte, dependiendo sus necesidades, integran en sus instalaciones talleres propios, con el fin de tener un mejor control de mantenimiento, pero principalmente para reparar en el menor tiempo las unidades.
A decir de los expertos, esto es lo ideal para las firmas de transporte; sin embargo, la falta de capacitación de los técnicos y mecánicos, así como la carencia del equipo necesario, resulta contraproducente en muchos de los casos, ya que el impacto en los costos de operación se eleva considerablemente.
Por esta razón, algunos transportistas optan por llevar a los talleres de las agencias de marca sus unidades, más aun si éstas se encuentran en los periodos de garantía.
Capacitación continua
Con estos requerimientos que apoyan la competitividad del sector, los especialistas recomiendan que, en caso de que la empresa se incline por mantener su propio taller, se debe de tener una capacitación continua.
“La productividad, la eficiencia y su orientación hacia la rentabilidad de los centros de reaparición, son producto del nivel de compromiso, motivación, visión y esfuerzo del capital humano, así como de un cambio en la cultura organizacional, estrategias que deben implementarse en el taller; es por ello, que se debe de invertir en desarrollar estas virtudes, mantener un programa continuo de formación”, afirmó el Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (Cesvi).
Aseguró que la capacitación es una inversión estratégica rentable a corto, mediano y largo plazo, y la cual debe ser especializada y estratégica de acuerdo al tipo de equipos y sus tecnologías.
Ante esta demanda, y dada la diversidad y características peculiares que tienen los vehículos de carga y pasaje, Cesvi México se ha dado a la tarea de investigar y desarrollar diversos cursos de reparación y gestión de taller, cuyo objetivo es dar a conocer las técnicas, materiales, equipos, y herramientas adecuadas que mejoren los procesos aplicados hoy en día en el centro de reparación y que permitan restituir al elemento a sus propiedades mecánicas y estéticas originales.
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