Transportistas, productores del campo y el gobierno llegaron a un acuerdo que cancela los cierres carreteros previstos para esta temporada de fiestas decembrinas.
El gobierno de México señaló que estos acuerdo fueron alcanzado con el Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano (FNRCM) y del sector transportista.
En este sentido, las autoridades mexicanas señalaron que, como parte del acuerdo, se acordó reforzar la presencia operativa en las carreteras, dar acompañamiento en tramos de mayor riesgo y fortalecer el uso de la tecnología para dar mayor seguridad.
Asimismo, con el sector agroalimentario acordaron discutir propuestas para la venta de cultivos, además del establecimiento de rutas institucionales para analizar los temas relacionados con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
El Gobierno de México ratifica su compromiso de escuchar, dialogar y construir soluciones a las problemáticas del campo, así como condiciones de seguridad de las carreteras”, señaló la secretaría de gobernación.
En este último trimestre del año, agrupaciones de agricultores y transportistas han realizado y bloqueos carreteros en todo el país, una amenaza que hasta este último mes del año ha permanecido latente.
Amenaza constante
En este contexto, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) ha manifestado su preocupación ante tales acciones.
La CANACAR advirtió que estas medidas, al realizarse fuera de los cauces institucionales, generan afectaciones directas a la sociedad, la economía y al derecho constitucional al libre tránsito. Además, subrayó que este no es un mecanismo eficaz para la solución de demandas.
Resaltó que los bloqueos provocan retrasos logísticos, pérdidas económicas significativas, riesgo de desabasto de productos esenciales y daños a las actividades productivas. Por ello, a través de un comunicado, apuntó que quienes los promuevan deberán asumir las consecuencias sociales, económicas y de seguridad.
A finales de noviembre, la manifestaciones y bloqueos en los corredores logísticos de México dejaron pérdidas mayores a los seis mil millones de pesos, una cifra que la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO SERVYTUR México) incluso considera conservadora.
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