El empresario transportista, Miguel Ángel Martínez Millán, informó en su cuenta de X (antes Twitter), que se registró como candidato de unidad para continuar como presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) para un tercer periodo.
Agradezco profundamente a los afiliados por la confianza y la oportunidad de seguir sirviendo a nuestro sector”, se lee en la publicación.
De acuerdo con Millán, mantendrá una postura propositiva ante la autoridad, siempre con la disposición al diálogo y de contribuir a las políticas públicas que generen beneficios reales para la industria.
Asimismo, ante sus afiliados, ratificó el compromiso de consolidar la profesionalización del sector, avanzar en la modernización de la flota, y contribuir en el comercio bilateral al margen de la importante participación del sector en este rubro de la economía.
Confío en que juntos, seguiremos construyendo un sector más fuerte, dinámico y unido, capaz de enfrentar los retos del presente y del futuro”, sostuvo.
En los últimos años, CANACAR se ha concentrado en disipar algunos de los principales desafíos operativos que aquejan al sector, como la reapertura de la frontera entre Chihuahua y Texas, la afinación del tabulador para los servicios de grúas, la presentación de placas para vehículos de carga eléctricos, así como la armonización de la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial en estados y municipios.
Los retos para el corto plazo
CANACAR deberá seguir buscando la estrategia y alianzas adecuadas para reducir el robo contra el transporte de carga, que en 2024 superó los 15 mil incidentes; la escasez de operadores, que ya rebasó las 56 mil plazas vacantes; la modernización de la flota de carga que en 2023 alcanzó los 20.8 años de antigüedad; y fortalecer la formalidad de un sector en donde el 97.5% de las unidades productivas son micro y pequeños transportistas.
No menos importante es eliminar la sobrerregulación para el tránsito, la carga y descarga de mercancías, en un país que cuenta con 2,477 municipios y 32 entidades federativas, de las cuales, en al menos 10 estados se imponen reglamentos restrictivos o recaudatorios.
El sector también espera avances en materia fiscal, principalmente en el IVA No Objeto, que actualmente resta competitividad al transporte mexicano transfronterizo.
Este 2025 es considerado como la antesala a la revisión del T-MEC, un acuerdo que históricamente ha dejado en desventaja al transporte de carga mexicano. En un escenario en donde la relocalización y el comercio electrónico mantienen su dinamismo, mejorar las condiciones operativas del autotransporte federal será esencial para alcanzar la meta de desarrollo de la nación.