Porsche es una firma conocida en todo el mundo por sus espectaculares autos, sin embargo, la amadora también destaca por la integración de elementos para hacer más sostenibles sus operaciones, entre las que incluye seis nuevas unidades de la marca Scania eléctricas para sus actividades en Suiza.
Además de estos vehículos, la flota utiliza 22 unidades de biogás enfocadas a trasladar materiales entre las plantas de producción. Mientras que otro camión eléctrico lleva los vehículos nuevos desde a planta de Zuffenhausen, en Alemania, a Suiza.
Sin embargo, el proceso de descarbonización no se limitan a estos vehículos Scania, ya que la empresa también prueba el uso de un carburante diésel sintético (HVO100) para sus unidades. Este elemento tiene varios años de ensayo con la supervisión del Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT).
“La descarbonización es parte de nuestra estrategia de sostenibilidad. Los camiones con sistemas de propulsión y combustibles alternativos son un paso importante hacia la consecución de nuestros ambiciosos objetivos. Buscamos una combinación de sistemas de propulsión que se adapte a la finalidad de los vehículos”, afirma Albrecht Reimold, miembro del Consejo de Dirección de Porsche como responsable de Producción y Logística.
Logística completa
Aunado a estas unidades de bajas emisiones o libres de éstas, Porsche Transport Logistics también apuesta por el uso de trenes para el surtido de piezas a las fábricas, así como para el transporte de vehículos nuevos hacia los puertos marítimos, con el propósito de mandarlos fuera de Europa.
Producción neutra
La producción es otra de las iniciativas con la que cuenta la empresa para cuidar su huella de carbono. El claro ejemplo está en las plantas de Porsche en Zuffenhausen y Leipzig, las cuales han conseguido realizar una producción neutra en carbono y hacer uso de electricidad procedente de fuentes de energía renovable.
Así es como Scania y Porsche, dos firmas de alcance mundial, trabajan juntas para reducir emisiones.
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