Volvo Buses ya había anunciado la suspensión de sus actividades debido a la pandemia mundial de COVID-19 y a la fase 2 que aún se mantiene en México por esta causa.
Ahora, emanada de la decisión del pasado 30 de marzo de alargar la cuarentena hasta el 30 de abril de 2020, la firma se mantiene a expensas de las disposiciones oficiales.
Y es que tras la declaratoria del canciller Marcelo Ebrad de la amenaza del coronavirus como emergencia nacional, se solicitó de forma tajante que las actividades no esenciales se detuvieran, por lo que su actividad productiva de la armadora en su planta de Tultitlán no se puede reactivar hasta nuevo aviso.
Por otro lado, la operación del transporte público de pasajeros sí es considerada esencial, por lo que tanto eso, como los servicios de posventa, mantenimiento y servicio de unidades continúa en pie.
Asimismo, Volvo Buses se comprometió a continuar operando en las áreas que se les permiten, sí, pero bajo las medidas de salubridad necesarias para quienes continúan laborando, así como lo implementaron desde la declaratoria de pandemia por la OMS.
“En una carta abierta emitida la semana pasada por la Dirección de Postventa Comercial a todos sus clientes en el país, Volvo Buses México reiteraba precisamente el compromiso con ellos en estos tiempos de incertidumbre, reafirmando uno de los pilares de la estrategia de Volvo, que representa ser la opción número uno para los operadores de transporte urbano y foráneo”, comunicó Volvo Buses.