La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), informó que del 1ro. de enero de 2009 al 31 de julio de 2015, se han registrado un total de 16,130 unidades de pasaje usadas importadas en el país, lo que implica un serio reto para la renovación vehicular.
Sólo en 2015, detalló, la entrada de estas unidades ha reportado un incremento constante, acumulando 823 autobuses de este tipo en lo que va del año.
“En lo que va de 2015, se tiene registrado un claro incremento mensual de vehículos usados urbanos de pasajeros. Como ejemplo, en julio se detectaron 188 unidades, lo que representa que por cada 10 vehículos de pasajeros vendidos nuevos, se importan 3 más usados de Estados Unidos, con una antigüedad considerable”, precisó Miguel Elizalde Lizárraga, presidente ejecutivo de ANPACT.
Lo anterior, dijo, se debe en gran medida a la demanda por parte de los grandes centros urbanos, donde a falta de lineamientos técnicos y requisitos por parte de las autoridades locales, se importan autobuses escolares de desecho de Estados Unidos para la prestación de este servicio público.
“A diferencia de la reglamentación federal que limita la operación a 15 años de antigüedad, en la mayoría de las entidades federativas no existe una edad máxima para vehículos de pasajeros. Sin duda, un vacío que debe corregirse”, apuntó.
Según la ANPACT, los estados tienen que homologar los lineamientos técnicos de autobuses, considerando características de seguridad y calidad al usuario, aunado a un año modelo máximo para su circulación.
De esta forma, señaló, no sólo se garantizaría una flota más moderna, capaz de prestar un mejor servicio al usuario, sino que las zonas urbanas podrían contar unidades que les brinden mayor comodidad y menor contaminación.
Añadió que lineamientos de este tipo ya existen en el Distrito Federal, Estado de México, entre otras entidades con grandes concentraciones urbanas.