Mediante el fortalecimiento de sus proyectos de renovación y ampliación de su flota, Estafeta Mexicana continúa cumpliendo de forma eficiente con los compromisos de entrega.
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A lo largo de 25 años, Estafeta Mexicana ha logrado trazar una ruta de logros, que le han permitido destacar en número de clientes, ventas y envíos transportados, covirtiéndose así como una de las principales compañías en México de mensajería y paquetería.
Parte de este éxito se debe, entre otros aspectos, a la adecuada elección de sus proveedores, principalmente de unidades, un factor primordial para ofrecer calidad en sus servicios.
De acuerdo a este esquema, los planes de crecimiento de la empresa durante este año avanzan de forma sostenida. Con una inversión de 60 millones de pesos proyecta adquirir 207 unidades nuevas.
De este monto, tan sólo para el 2010, Estafeta destinará 13 millones de pesos para la renovación y ampliación de su flota de vanes. El proyecto consiste en estandarizar todo su parque vehicular por modelos Sprinter Mercedes-Benz.
Esta selección responde al criterio de Estafeta de poseer unidades configurables para sus necesidades, que tengan una amplia red de distribuidores, excelente programa de postventa, cobertura a nivel nacional, así como precios competitivos.
Actualmente, sus principales proveedores de camionetas tipo vanes son: Mercedes-Benz y Volkswagen. La flota está compuesta por 860 unidades (500 vehículos Sprinter y 360 Eurovan C4, C5 y Combi Panel).
Sólida relación
La vinculación entre Estafeta y Mercedes-Benz se remonta al año 1998, resaltó Ingo Babrikowski, director general de Estafeta México. En aquel año, recuerdó, no existía en el mercado un vehículo apropiado para las necesidades de la compañía. Fue entonces cuando solicitamos a Mercedes-Benz que comercializara los modelos Sprinter en nuestro país.
Para el año 2002, agregó, directivos de la compañía viajaron a la planta de Mercedes-Benz en Alemania con el fin de especificar las características y accesorios de lo que sería el primer pedido de estas vanes para Estafeta.
Fue en marzo de 2003 cuando llegaron las primeras Sprinter a Estafeta Mexicana, con las que dieron inicio a un importante programa de renovación vehicular.
Estas unidades, afirmó el directivo, fueron asignadas a los operadores en reconocimiento por su desempeño, lo que les permitió poner en marcha una cultura de seguridad en el manejo, así como en su cuidado y mantenimiento.
En el mismo año, la Sprinter de Estafeta obtuvo el premio “Imagen Corporativa Aplicada al Vehículo” en la categoría Van-camiones ligeros por la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), en el marco de Expo Distribución. Desde entonces, señaló Ingo Babrikowski, esta camioneta ha cumplido con todas sus expectativas.