El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, lamentó el fallecimiento de siete personas y que cuatro más resultaran heridas como consecuencia del desgajamiento ocurrido la noche de ayer en el kilómetro 70 del cuerpo B de la autopista México Querétaro, hecho ocasionado por una granizada y lluvia de magnitud desproporcionadas.
Luego de que anoche coordinara acciones de rescate de víctimas e instruyera se les otorgará la debida atención, Ruiz Esparza superviso hoy los avances en los trabajos de retiro de lodo y escombros, además de revisar las medidas que se llevarán a cabo para, en lo posible, evitar situaciones similares y reanudar la circulación en esa importante vía de comunicación.
Entrevistado en el lugar, el titular de la SCT señaló que el derrumbe se dio por la granizada y lluvia de proporciones desmedidas que afectó la zona que generó alrededor de 500 metros de lodo.
Explicó, que se hará el cerro un poquito más tendido rebajándolo para que no quede tan inclinado. Se le rebaja, por seguridad, de la parte alta. “Vamos a trabajar aquí, seguramente todo el día, toda la noche, y mañana en la parte del día en rebajar el cerro”. En este sentido reitero que seguramente todo el día estará cerrado ese carril de la carretera.
Recomendó la mejor opción: desviarse por la cabecera municipal de Tepeji del Río para llegar al Arco Norte y pidió por favor a todos los usuarios considerar que no habrá paso en este tramo en el que se va a estar trabajando.
Luego de apuntar que en cuanto llegue la maquinaria especializada se empezará a trabajar en el rebajamiento del cerro, agregó que espera no sea necesario cerrar la circulación del cuerpo A de la autopista (México-Querétaro), aunque si fuera indispensable se tomaría esa decisión. “Tomaremos todas las precauciones e incluso estamos considerando que a las horas pico, cuando haya más tráfico, seguramente la gente por curiosidad va a disminuir la velocidad de sus vehículos y eso nos obligará a tener otro tipo de precaución”.
Gerardo Ruiz Esparza reiteró que “vivimos en un país de montañas, en un país en que las carreteras prácticamente se han construido a través de montañas, a través de túneles, hay que vivir con ellas.
“Es muy lamentable lo que sucedió ayer. Fue una tormenta impresionante. Gente que estuvo aquí me dio testimonios personales de que cayeron granizos –todavía se ve la secuela desde la parte alta se ven blancas todavía muchas zonas- del tamaño de una pelota de pin pon.
Realmente la gente que venía en coche sentía que se iba a romper el parabrisas o que el coche iba a afectarse de lo fuerte que estaba cayendo la tormenta, eso provocó que en la parte alta del cerro se acumulara muchísima agua y como no drenaba por el propio granizo que le estaba deteniendo provocó que se desgajara el cerro con un saldo muy lamentable de siete personas fallecidas, cuatro personas heridas que, entiendo, no están de gravedad, están en siendo atendidas”.