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Rodrigo Brito. El motor de la frontera norte

El timonel de la Central de Servicios de Carga de Nuevo Laredo (CenSeCar), uno de los pilares 
del transporte en el norte de México, reconoce los retos y oportunidades para el sector

Rodrigo Brito. El motor de la frontera norte

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La frontera norte es un punto neurálgico para el autotransporte nacional. En este lugar los cruces de mercancías por vía terrestre no sólo se cuentan por día, sino también por hora e incluso por minutos.

La efervescencia del intercambio comercial entre México y Estados Unidos simplemente no podría existir ni entenderse sin el transporte en esta región. En esta zona del país, donde todo sucede, uno de los protagonistas es Rodrigo Brito, director general de la CenSeCar, cargo que desempeña desde 2019.

En entrevista con Alianza Flotillera, Rodrigo Brito destaca que formar parte de CenSeCar es un desafío que todos los días asume con compromiso y alegría, además de que representa un privilegio.

“Dentro de la CenSeCar están como socios los personajes más representativos y las líneas de transporte más importantes del país. Esto conlleva un reto de todos los días, toda vez que la gente con la que tratas son conocedoras del autotransporte”.

No es para menos, ya que la agrupación cuenta con oficinas desde Tijuana hasta Matamoros, con una participación en alrededor del 60% de las operaciones que se realizan en la franja fronteriza, y aproximadamente 46% de las realizadas sólo en Nuevo Laredo, lugar que puede considerarse como la capital del autotransporte.

Los servicios que ofrecen van desde el trámite de pedimento de importación temporal hasta el proceso del manifiesto electrónico para transportar mercancías hacia Estados Unidos, todo esto gestionado desde sus centros de operaciones en ciudades como Tijuana, Mexicali, Nogales, Ciudad Juárez, Piedras Negras, Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros.

Carrera de largo kilometraje

De tal suerte que una agrupación como CenSeCar, creada hace casi 50 años por algunas de las principales líneas transportistas del país, requiere en su dirección conocimiento, pasión y experiencia, perfil que encaja con el de Brito, que ahora mismo acumula un recorrido profesional de un cuarto de siglo.

Este camino comenzó en la administración pública, primero en el gobierno de Tamaulipas y luego en el Estado de México.

Cargos que le permitieron adquirir tablas en un sentido social, además de obtener el conocimiento sobre la operación y peculiaridades que tiene la frontera, vivencias que lo llevarían a colaborar en la Dirección General de Autotransporte Federal, labor con la que en 2015 inició sus andanzas en el sector.

Y es que, a decir de Brito, incursionar en el autotransporte le ha enseñado a dimensionar la relevancia de un sector encargado de mover todos los bienes que se consumen a diario.

“Trabajando dentro del sector entiendes aquella frase que utilizan los transportistas de que el transporte son las venas de México. Eso es lo más trascendente”, destaca el directivo sobre esta incursión en el autotransporte, misma que lo llevó a tomar las riendas de la CenSeCar en 2019, una decisión que él mismo considera como una de las más relevantes a lo largo de su trayectoria, al pasar de desempeñarse en la iniciativa privada luego de varios lustros dentro del sector público.

Mirada hacia el frente

Apasionado del motociclismo y los viajes, actividades que indirectamente se relacionan con el transporte en lo esencial, Brito ha asumido la dirección de la Central con la mira puesta en seguir contribuyendo, como desde hace medio siglo, en simplificar los cruces fronterizos para los transportistas.

“Tenemos reuniones periódicas con gobiernos tanto mexicanos como estadounidenses. Esto en función de saber de qué manera podemos contribuir para que el traslado de mercancías sea un proceso seguro, confiable y expedito. Ese es el principal reto y lo hemos ido logrando”, destaca.

En línea con estos objetivos, Brito resalta retos de la CenSeCar, tales como consolidar nuevas herramientas para facilitar los cruces, así como dar mayor solidez a la agrupación en cada una de las ocho oficinas que existen a lo largo de la frontera, así como dar mayores pasos hacia adelante con la digitalización.

“Una encomienda recibida al llegar a la dirección general de la Central fue reestructurarla y darle nueva vida. Al día de hoy, afortunadamente y gracias al trabajo de mis compañeros gerentes, es algo que se ha logrado proyectar”, señala.

Si bien los logros y los retos profesionales son cuantiosos, para Rodrigo Brito lo más importante es contribuir e impulsar las oportunidades que se presentan en el sector, siempre con los ojos puestos en aportar sus conocimientos para perfeccionar y hacer del autotransporte mexicano una maquinaria cada vez más eficiente.

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