Antonio Arreola Gómez
Responsabilidad en la seguridad vial
Para este directivo, el mundo de la capacitación está enfocada al factor humano, ya que las teorías de enseñar técnicas de conducción han quedado desplazadas, considerando: “No es lo que hace o sabe hacer el operador, sino que pretende hacer”
De provenir de una vida en el campo, este experto en capacitación humana, nunca imaginó que al concluir su carrera profesional y soñar, de inicio, con abrir una escuela, hoy se dedicara a formar operadores del autotransporte comprometidos, mediante mejores prácticas de conducción, con las empresas en las que laboran.
“Soy Ingeniero Químico, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); empecé a estudiar la secundaria a los 25 años de edad, ya que trabajaba en labores del campo, no era nada fácil, sobre todo para mí que tenía grandes ambiciones de crecimiento personal.
“A los 34 años terminé la Universidad, y al tener problemas por la edad para entrar a laborar a las áreas farmacéuticas o químicas de las empresas, entonces me dediqué a ser instructor y capacitador, además de dar clases de Física, Química y Matemáticas en el Distrito Federal, recuerda.
“Siempre soñé con tener una empresa, inicialmente con tener una escuela, desde kínder hasta preparatoria, pero la tendencia del mismo trabajo me fue orillando a ser instructor, lo que hoy en día me llena profesionalmente y, por tanto, busco más retos en esta actividad”, recuerda.
Advierte que esta industria, le ha dado grandes satisfacciones de desarrollo profesional y personal, además de proporcionarle todo lo necesario a su familia.
Los inicios…
Antonio Arreola Gómez refresca su historia en el autotransporte, sector al que llegó gracias a sus pasos por desarrollar programas de protección civil, oportunidad que le abrió el Gobierno de la Ciudad de México, entidad a la que le elaboró este tipo de esquemas, y poco apoco, certificarse, para la implementación de la Norma ISO 9000.
Con esta experiencia, detalló, y ante la demanda de colaborar con el gobierno capitalino, abrió Grupo Peñasco, firma dedicada a la capacitación humana, que hace aproximadamente una década se enfocó con esta entidad a la creación del Programa de Capacitación a Operadores del Transporte Público.
“De aquí nació el interés por el autotransporte, por lo que nos encargamos de buscar gente preparada en el tema; y de esa manera, llegamos al Instituto Mexicano del Transporte (IMT), con que también colaboramos, además de acercarnos a especialistas como Alberto Mendoza, experto en seguridad vial, y Francisco Toledo, de la Universidad de Valencia, reconocido a nivel mundial”, manifiesta.
Agrega que así nace su andar en el autotransporte, industria a la cual le ha tomado gran interés, tanto que hace cuatro años, desarrolló una campaña denominada “Cero Accidentes”, dirigida a la sociedad civil para hacer conciencia en seguridad vial, “pues es algo altruista y queremos aportarle algo a la sociedad”.
Por ello, dice, ahora están arrancando otra campaña, llamada “cruzada por la seguridad vial”.