Integrantes de la Camara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar), a través del Consejo Nacional Directivo de Canacar solicitó en una carta abierta al gobierno federal detener el aumento en el precio del diesel a fin de no poner en riesgo las fuentes de trabajo.
Dicho documento explica la importancia de este sector que su naturaleza, es prioritario y estratégico para la economía, ya que por este medio se traslada alrededor del 82 por ciento de la carga, tanto nacional como internacional, y dependen, directa e indirectamente, más de cuatro millones de familias, además de que constituye un factor fundamental para la competitividad del país.
El diesel y las autopistas, dos de sus principales insumos, representan el 50 por ciento de los costos de operación, son proporcionados por el gobierno y no existe ninguna otra opción para adquirirlos.
Añaden que la decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de incrementar, semanalmente, en cinco centavos el precio de cada litro de diesel, colocaba en un grave riesgo la viabilidad de nuestras empresas (más de 100 mil, en su amplia mayoría micro y pequeñas).
No obstante los incrementos han continuado, de enero de 2008 a enero de 2009 el aumento ha sido de 1.65 pesos por litro que refleja el 27 por ciento de aumento.
Lo que significa que si el diesel representa un 30 por ciento de los costos de operación, es claro que este sector ya no está en condiciones de soportar mayores aumentos en este escenario de recesión económica.
Asimismo, comentan que desde que se anunció el Acuerdo Nacional a favor de la Economía Familiar y el Empleo, inmediatamente manifestamos nuestra inconformidad por no haber incluido al diesel en el mismo.
Sin embargo, la insistencia de continuar los aumentos, ahora de cinco centavos mensuales, refleja un objetivo recaudatorio que necesariamente se traducirá en presiones inflacionarias (se pretende aumentar el diesel en 11 por ciento, mientras que la inflación esperada para 2009 es del cuatro por ciento), con graves consecuencias para la economía familiar y el empleo.
Los autotransportistas exigieron al gobierno hacer un esfuerzo adicional y detener el aumento en el precio del diesel para no poner en riesgo las fuentes de trabajo.
Señalaron que al congelar los precios de las gasolinas se benefició sólo a los sectores medio y alto de la población que utilizan el automóvil para su traslado.
Mientras que eliminar los aumentos en el precio del diesel beneficiará a toda la población, ya que el 100 por ciento de los bienes de consumo popular se transportan por camión.