Nikola es una armadora fundada por Trevor Milton, un sujeto que abandonó el highschool (secundaria o preparatoria en EU) y posteriormente también la universidad, posteriormente, se volvió millonario.
Y es que el extraño camino de la armadora, movido por especulaciones, inversionistas y pedidos sin unidades se asimila al de Elon Musk y Tesla, por lo menos así lo deja ver Bloomberg.
La armadora se cotizó con mayor valor que Ford, lo que llamó demasiado la atención, todavía no ha comenzado la producción de algún modelo.
Sin embargo, la gran revelación de la agencia de investigación, Bloomberg, es que Nikola, y Milton en particular, “vendieron” un proyecto con capacidades exageradas, y que le faltan partes esenciales, hablamos del Nikola One.
No hay nombres concretos, pero sí la credibilidad de Bloomberg, pues personas relacionadas con la fabricación del vehículo dicen que el camión presentado en 2016 ni siquiera se movía por sí solo, cosa que Milton aclaró como cierta alegando a que era por seguridad. Lo grave: él había afirmado en su presentación que el modelo era “manejable”, cuando tuvo que ser empujado hasta el escenario.
A pesar de que estaban pegadas las palabras “H2 Zero Emission Hydrogen Electric” en el vehículo, no había una celda de combustible a bordo, según las fuentes de Bloomberg.
Milton no tardó en reaccionar, y mandó un documento a Bloomberg señalando que no tolerará más mentiras de periodistas para engañar a otros, esto según el empresario.
This just got sent to Bloomberg by our legal team. I wont stand for lies from Journalists when they knowingly deceive to harm others – It hurts all journalists. Wait until the full recorded interview comes out and it will expose Ed Ludlow for who he is. pic.twitter.com/2bbyH84AEc
— Trevor Milton (@nikolatrevor) June 18, 2020
La pelea por los derechos del diseño del Semi de Nikola y el One de Tesla suma otro problema a la empresa dirigida por Milton, dado que parece ser que nada los “tumba” y siguen con sus proyectos de cara a los siguientes años y la instauración de una fábrica en el sur de Phoenix.
Si estos problemas del modelo One en 2016 eran reales, ¿ya se habrán corregido? ¿Llegarán los One en 2023 como el vehículo prometido que fue? Esas preguntas sólo las responderá el tiempo y los productos de la armadora ya en las carreteras y no como conceptos.