Aunque la participación de las mujeres en el mercado laboral se ha incrementado en los últimos años, en sectores como el autotransporte su presencia sigue siendo mínima, pues en este aún prevalece la figura masculina.
De acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el cual fue presentado en 2018, en México hay más de 214 mil personas ocupadas en el transporte de carga, de las cuales poco más de 24 mil, lo que representa sólo el 11.54%. Mientras que en el transporte colectivo urbano y suburbano de pasajeros en autobuses de ruta fija, hay 69 mil 487 empleados, de los cuales seis mil 683 son del género femenino, es decir, apenas el 9.6%.
De acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT), en México solo mil 380 mujeres son operadoras en el trasporte de carga en un sector que aporta el seis por ciento del Producto Interno Bruto.
Son varias las razones por las que el trabajo de las mujeres en este sector es mínimo, pero destacan la falta de flexibilidad en el horario y cuestiones culturales, principalmente.
No obstante lo anterior, poco a poco se han ido abriendo sus propios espacios en las líneas de producción, en las áreas de finanzas, marketing y ventas, incluso como operadoras de unidades de carga y pasaje.
Actualmente, son pocos los planes de carrera en las empresas que incentivan su participación dentro de la industria, sin embargo, hay avances significativos que motivan a otras a continuar en el camino.
Bajo ese panorama, mujeres que han buscado romper esquemas y la brecha de género, nos platican cómo ha sido su experiencia al irrumpir en un mundo que es dominado por los hombres.
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