La inseguridad en las carreteras, en los últimos años, se ha convertido en una de las principales problemáticas que más afectan al transporte de carga, segmento que ocupa la tercera posición en robos a nivel nacional.
El tema de la inseguridad es algo que ha preocupado en los últimos años a la sociedad, y los transportistas no son la excepción.
Estos últimos, han sido clave en los robos en carreteras, principalmente, y cuya actividad delictiva ha ido en ascenso.
Según el mapa informativo, desarrollado por la Asociación Mexicana de Seguridad Privada Información Rastreo Inteligencia Aplicada (Amsiria), de acuerdo a sus últimos reportes de 2012, el incremento de robo a nivel nacional de transporte de carga es de 25 por ciento; en el rubro de pasajeros, 30 por ciento; y en el particular, es de 33 por ciento.
Señala que los horarios de mayor incidencia de los robos, son entre 4:00 y 6:00 horas, debido a la falta de vigilancia de las autoridades.
Agrega que el mayor número de estos delitos, se llevan a cabo en el Área Metropolitana y en los límites de los municipios con el Estado de México.
Advierte que los lugares más peligrosos para los transportistas son: Nuevo León, Guerrero, Michoacán, Distrito federal, Estado de México, Jalisco, Tamaulipas y Veracruz.
Sólo en la Zona Metropolitana, sobresalen: Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Cuauhtémoc.
En tanto, las carreteras de más alto riesgo, son:
México-Puebla-Veracruz
México-Querétaro
México-Guadalajara
México-Monterrey
Querétaro-San Luis Potosí (Matehuala)
Tepic-Sinaloa
Zacatecas-Monterrey
Zacatecas-Torreón-Durango
Coahuila-Tamaulipas
Colima-Michoacán
Oaxaca-Puebla
Factor humano
Ante esta problemática, hoy en día empresas transportistas empresas, asociaciones y operadores, con la ayuda de la tecnología, han visto disminuido el riesgo de robos a sus unidades, pero el factor humano es de vital importancia para reducir la inseguridad.
“En algunos casos, los conductores corren riesgos que los hace vulnerables ante la delincuencia”, comentó Alberto Rivera, presidente de Amsiria.
Al respecto, manifestó, el modus operandi más común en los robos a vehículos pesados es cuando el operador se sale de su ruta, se detiene más tiempo del indicado o no reporta que va a hacer una parada no establecida; en esos momentos es cuando la delincuencia tiene la oportunidad de actuar.
Resaltó que estadísticamente, de cada 10 robos que se presentan, en dos está involucrado el operador, “aunque esto no quiere decir que el chofer esté coludido con los ladrones, sino que de alguna manera se le involucra porque hizo algo que no estaba permitido, como hacer una parada o salirse de la ruta”.