Posicionar a Kinedyne en el mercado nacional, ha sido uno de los retos más destacados de Roberto J. Salido, Ingeniero Industrial que, desde sus inicios, ha forjado su carrera profesional en el sector automotor y del transporte.
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Tras concluir su carrera como Ingeniero Industrial, en la Universidad Iberoamericana, este directivo se enfocó en la venta de partes automotrices, principalmente retenes y baleros.
Advierte que desde que era estudiante universitario, se inclinó hacia el mundo del transporte.
“Como ingeniero Industrial, uno se enfoca a la industria y yo al a mecánica; pues de hecho, la mayoría de mis compañeros de la universidad se fueron al rubro bancario; yo estuve siempre involucrado con la mecánica industrial, desde ahí mantuve inquietud por lo automotriz, en sus diversos ámbitos”, explica.
Asimismo, muy joven tuvo la oportunidad de estar al frente de la distribuidora “Retenes y Refacciones S. A. de C. V.”; y posteriormente, en Grupo Nacional de Rodamientos S. A. de C.V., a la par de incursionar en refacciones para la industria aeronáutica, sector al que se dedicó por un tiempo.
“Durante más de cuatro años me dediqué a comercializar aviones y helicópteros, así como dar mantenimiento a aeronaves y fue hasta 1998 que ingresé de lleno a Sistemas Kinedyne S. A. de C. V., firma que empezó operaciones desde junio de 1995, en la que inicié, me fui y regresé ocupando el puesto de Director General”, recordó Roberto J. Salido Reyero.
Aseguró que desde ese entonces, ha visto evolucionar el crecimiento de la compañía especializada en sistemas de sujeción y control de carga, la cual tuvo una apertura complicada, ante la falta de cultura de seguridad en las mercancías en el autotransporte.
Mercado complicado
“Cuando empezamos el tema de la sujeción y control de carga, el mercado estaba desatendido, no se prestaba la atención debida; comenzamos a promover el producto por la necesidad de seguridad a nivel mundial en el transporte de mercancías.
“Nuestra primera incursión se dio con los transportistas, aconsejándoles que la carga podía sujetarse de manera segura, eficiente y profesional; cumpliendo, además, con las normas establecidas en la materia a nivel internacional.
“Al principio, el transportista se negaba, pues ‘aseguraba´ la mercancía con ‘mecates´, cubriendo la carga con lonetas para cubrir contra la lluvia. Al no obtener mucho éxito, visitamos a los a los fabricantes de remolques, quienes expusieron que ‘si el cliente no lo pedía, no lo iba a incluir, pues sólo subía el costo de los productos”, apunta.
Agrega que al final, la estrategia se enfocó hacia el propietario de las mercancías, con aquellas empresas que operan grandes flotas, como Coca-Cola, Bimbo, Grupo Modelo, entre otras, pues se visualizó un área de oportunidad en aminorar las mermas. “Al inicio fue difícil, pero logramos convencer a empresas como Liverpool, de reducir el número de viajes en sus entregas y con su carga en las mejores condiciones. Aquí, con la implementación de las barras estibadoras en las unidades, logramos la eficiencia del 100 por ciento en el uso del volumen disponible, según las especificaciones del cliente; los viajes se redujeron considerablemente, de cinco vueltas a sólo tres”.
De esa manera, añadió el directivo, paulatinamente llegó el crecimiento de Sistemas Kinedyne como marca, y empezaron a unirse a la cartera de clientes los fabricantes de remolques para instalar, a solicitud de sus clientes, los sistemas de sujeción en sus remolques. Además, se unió Bimbo con la utilización de las barras estibadoras/retenedoras.
También, detalla, se sumó Aurrera en el segmento de refrigerados, iniciando así lo que hoy es indispensable para los dueños de la carga.
De manera general, Roberto J. Salido Reyero manifiesta que en resumen, sí resulto difícil entrar al mercado mexicano. “Nos tardamos varios años, sobre todo, considerando que no hay una cultura ni una “Norma Oficial” que regule el transporte. Existe un proyecto de Norma en proceso que lleva ocho años de retraso, la NOM-077, que tiene que ver con sistemas de sujeción y control de carga en las carreteras federales”.
Con esta evolución, el directivo no duda en decir que lograr el reconocimiento del gremio del transporte, incluidos proveedores y fabricantes de este sector, le ha dejado una grande satisfacción.
“La empresa ha de manera importante, logrando una posición de liderazgo en el mercado mexicano; hemos introducido productos que solo se manejan en México; por ejemplo, las cortinas para tráiler”, mencionó.
Respecto a ese desarrollo positivo, señala que de ocho personas que iniciaron la empresa, hoy suman alrededor de 70, lo que reafirma su expansión en suelo nacional.
Para llegar a ello, considera que el camino fue largo, pero que actualmente los sistemas de sujeción y control de carga Kinedyne son referencia de eficiencia y productividad en la industria del transporte de mercancías.
Así, recomienda a los transportistas que la implementación de estos productos ofrece tranquilidad y calidad, sobre todo en carreteras como las mexicanas. No hay espacios para cargas sueltas, existen casos de camiones que se voltean solos por el movimiento de carga pesada no sujeta y la intensidad del giro o de movimiento brusco de la unidad.
Personalmente…
Y aunque es una persona con gran perseverancia en el trabajo, Roberto J. Salido Reyero apunta que ello no le ha valido sacrificar tiempo con la familia.
“Por el contrario, me gusta mucho lo que hago y en el ámbito familiar hago lo que tengo que hacer, dedicarles el tiempo debido a quienes quiero”,
En cuanto a tiempos libres, ostenta que, en la medida que puede, juega golf y basquetbol, y gusta de navegar por internet.
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¿Quién es?
- Es Ingeniero Industrial por la Universidad Iberoamericana.
- El gusto por el autotransporte se dio desde sus estudios universitarios.
- Inició en el mundo laboral, a través de la venta de partes automotrices, en la distribuidora “Retenes y Refacciones”.
- Actualmente, es Director General de Sistemas Kinedyne S. A. de C. V.