El Primer Congreso Internacional de Transporte Sustentable, “Sistemas Integrados de Transporte BRT”, organizado por el Centro de Transporte Sustentable y EMBARQ/World Resources Institute (WRI), permitió a los especialistas de diferentes países contrastar conceptos y lecciones, con el fin de continuar el trabajo de estabilización y consolidación del BRT (Bus Rapid Transit) como nuevo paradigma del transporte público urbano.
Este primer Congreso, que se llevó a cabo en las ciudades de México y León, permitió establecer niveles de comparación y de mejores prácticas en la administración de este sistema de transporte, teniendo en cuenta las particularidades políticas, regulatorias, institucionales, organizacionales y económico-financieras de los países participantes.
Se destacó el hecho de que los BRT son sistemas de transporte público urbano de alto rendimiento, sustentables ambiental, social y financieramente, operados con autobuses de alta capacidad, que constituyen alternativas ante proyectos de metros y trenes ligeros, especialmente en países y ciudades con restricciones financieras.
Los modelos BRT exitosos tienen en común su excelencia en el servicio al usuario, priorización del tránsito en intersecciones, autobuses modernos, limpios y de alta capacidad, así como un efectivo régimen regulatorio y una rápida implantación.
Al respecto,y con relación a nuestro recién inaugurado Metrobús, Édgar Enrique Sandoval, orador princiapl del Congreso, quien implantó en Colombia el Transmilenio, cuyo modelo es considerado en el mundo como un paradigma urbano, subrayó: que “transformar el Metrobús en un sistema de transporte, más allá del corredor de Insurgentes, requiere voluntad política del Gobierno y una visión a futuro de la ciudad”, y agregó: para ser sostenible y expanderse, este tipo de sistemas exige, más que autobuses nuevos, estaciones y carril segregado, una puntual organización operativa y financiera y una visión de futuro”.
Hizo hincapié en que la rentabilidad y durabilidad radica en la organización institucional y financiera, que no es fácil de adaptar, en mucho por las grandes peleas y costos políticos que implica.
Sin duda, el planteamiento de Enrique Sandoval, en el caso del Metrobús adquiere relevancia por la controversia que generó su puesta en operación, pues es un sistema que requiere de un impulso a largo plazo y que tiene que visualizarse en el contexto del transporte metropolitano de la ciudad de México con algunos municiapios del estado de México. Para lograrlo hay que superar diversos intereses económicos y políticos, por ejemplo, los que defienden diferentes grupos de microbuseros.
En el rubro de financiamiento, es alentador que el Banco Mundial (BM) en combinación con la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) preparan un apoyo económico, por aproximadamente 100 millones de dólares, para proyectos de transporte sustentable, principalmente de corredores similares al Optibús (León, Guanajuato) y Metrobús, los cuales podrían autorizarse el próximo año para beneficiar a las ciudades de Monterrey, Querétaro, Ciudad Juárez, Puebla, Tijuana, Veracruz y Mérida, interesadas en sumarse a este sistema integral de transporte.