El sector industrial mexicano lo tiene claro, urgen programas emergentes para reactivar las cadenas de valor de manera gradual pero inmediata, tomando en cuenta las recomendaciones de salud, pues el “virus llegó para quedarse un rato”.
En la conferencia virtual “Atención a la crisis en las cadenas de valor de la industria”, Francisco Cervantes, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), escuchó las voces de diversas cámaras y encontró la necesidad de reactivar escaladamente las diferentes industrias y activar la economía.
Un sector que va de la mano con la reactivación de actividades es la del autotransporte, así lo manifestó Enrique González Muñoz, presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), “el 100% de las cámaras y asociaciones que pertenecen a Concamin tienen un vínculo estrecho con nuestra cámara”, dijo.
Sin embargo, actualmente se encuentra detenido el 35.6% del parque vehicular, no sólo por el paro en la industria automotriz, también la cervecera y su industria alrededor como el transporte de trigo o cebada.
En su participación González Muñoz explicó que en cuanto se declaró la emergencia sanitaria en México tuvieron un acercamiento con la Secretaria de Comunicaciones y Transporte (SCT), Secretaria de Seguridad Pública (SSP), Secretaria de Economía (SE) y Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para crear estrategias para mantener el abasto y enfrentar la pandemia.
Aunque su voz no tuvo buena respuesta de todas las secretarias, el dirigente indicó que el principal problema que enfrentan es el robo al autotransporte, recordó que en los últimos cinco años este delito aumentó más del 30%, y aunque en el primer bimestre del 2020 la tendencia iba a la baja, actualmente se enfrentan situaciones más complicadas.
Señaló que en la zona sur, algunos pueblos apedrean camiones para voltearlos y saquearlos y en la zona norte del país, les queman unidades.
Hizo un llamado al gobierno para que el ejército se dedique a cuidar estos temas y no se encuentre distribuyendo hidrocarburos o construyendo aeropuertos o refinerías.
El dirigente reiteró que el autotransporte aporta el 3.2 del Producto Interno Bruto y que el sector es transversal, es decir que apoya a todas las industrias.