En algún momento hemos escuchado la frase “para obtener la máxima vida útil de la banda de rodamiento de las llantas y reducir el costo por kilómetro, es esencial minimizar los desgastes irregulares de la banda de rodamiento”.
Pero ¿qué es el desgaste y cómo se genera? El desgaste de la llanta es resultado de la fricción generada por el rodamiento de la llanta mientras ésta rueda.
La fricción se genera por muchos factores diferentes, incluyendo el tipo de hule de la llanta, la carga e inflado de la misma y la influencia de los sistemas mecánicos, tales como la alineación y la superficie del camino.
Por este motivo, te compartimos cuatro tips para ayudar a disminuir los desgastes irregulares en las llantas de tu flota:
1) Revisa con el fabricante la presión y carga recomendada
Recuerda que la nomenclatura expresada en el costado de la llanta no necesariamente será la recomendada para el vehículo, la presión correcta será determinada con base en la carga total por eje que tenga el vehículo, esto incluye la tara o peso del vehículo.
Existen métodos para determinar la carga teóricamente, sin embargo, lo ideal será hacer un pesaje. Tener la presión incorrecta podría propiciar un sobre inflado, causando desgaste en la parte central de la llanta y, por el contrario, un bajo inflado ocasionará un desgaste en los hombros o la parte externa de la llanta.
2) Mantenimiento puntual a los componentes de la suspensión
El neumático es el único punto de contacto con el piso, y si alguno de los componentes de la suspensión se encuentra en mal estado o mal calibrado, el efecto se reflejará principalmente en el desgaste de la llanta, y también en el confort percibido por el operador, pasajeros y/o mercancía.
Es importante el ajuste de pernos, amortiguadores, abrazadores, muelles, entre otras piezas, para que la llanta pueda transmitir de manera correcta los esfuerzos de amortiguación al suelo. El mantenimiento a estos componentes, en conjunto con el monitoreo de la presión adecuada en las llantas, contribuirán en el cuidado del sistema de suspensión.
3) Mantén a tus operadores capacitados siempre
Varios de los desgastes más comunes se deben precisamente a la operación y pueden ser prevenibles, los malos hábitos de manejo pueden ocasionar un desgaste rápido de la llanta o desgastes irregulares.
Algunas de las situaciones que causan esto incluyen: frenar bruscamente, conducir a una velocidad elevada y hacer demasiadas maniobras innecesarias.
4) Toma en cuenta las condiciones del camino
Es uno de los factores menos controlables ya que tanto la inclinación, las pendientes, la abrasión y el bacheo de las carreteras son cuestiones tan variables como podemos imaginar. Sin embargo, ejecutar los tips anteriores, ayudará a que el desgaste disminuya considerablemente para aprovechar al máximo los neumáticos.
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