Los efectos que se han materializado desde la aparición y propagación del COVID-19 en el mundo ha provocado que en los últimos meses muchas empresas aceleren sus decisiones de digitalización de sus cadenas de suministro, aseguró María Rey-Marston, Managing Director en Accenture.
Durante su participación en un webinar organizado en conjunto con el Consejo Nacional de Ejecutivos en Logística y Cadena de Suministro (Conalog), la especialista detalló que las empresas a través de la digitalización están buscando tener mayor visibilidad de sus operaciones en el transporte de mercancías.
“La pandemia del COVID -19 es un desastre de salud y economía a nivel mundial que alterará permanentemente el comportamiento de los consumidores y por consecuencia, generará cambios estructurales en todas las industrias a nivel global. En ese sentido las compañías están apostando por invertir en aquello que les permita lograr eficiencia operativa en un momento de disrupción sistemática en la oferta y la demanda que jamás se había visto en las cadenas de suministro”, sostuvo.
Agregó que junto a la propagación del virus, ha crecido también la preocupación en torno a la reactividad de las cadenas de suministro y su impacto en las compañías en el futuro próximo.
La especialista comentó que antes las empresas se podían prevenir con anticipación de los impactos que podían afectar las cadenas de abastecimiento, y de alguna manera se sabían cómo reaccionar y manejarlo los ante un escenario de crisis, pero el coronavirus ocasionó todo lo contrario y se perdió el control.
“El COVID-19 ha hecho más por la aceleración al cambio digital en la última década. Por lo tanto vemos que esto ha traído transformaciones importantes en las redes de abastecimiento que ahora serán más flexibles y cortas y con fabricaciones más cercanas a los puntos de demanda del consumidor final”, dijo.
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