La reforma eléctrica que esta semana se votará en el congreso no cumple con los elementos para garantizar las necesidades de la industria automotriz, por lo que resta competitividad a México en comparación con la región sur de Estados Unidos.
Esto de acuerdo con Guillermo Rosales, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), quien señaló que los requerimientos de la industria son: producción de electricidad suficiente, precios competitivos y que esta provenga de fuentes limpias.
“La energía debe ser suministrada a precios competitivos respecto al entorno internacional y principalmente teniendo como referencia al sureste de EU. Lo hemos dicho, hay muchos factores de costo que estamos perdiendo competitividad respecto a los estado del sur de EU”, dijo Rosales.
En ese sentido indicó que los otros elementos en los que se resta competitividad al país son los costos logísticos, de seguridad y de infraestructura en aduanas, ferrocarriles, autopistas y aeropuertos.
Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), dijo que esta reforma también debe considerar que la industria atraviesa una fase de tracción hacia fuentes energéticas menos contaminantes e incluso limpias.
“Requerimos suministro certero, confiable y competitivo que atienda el potencial de crecimiento. Eso es lo que requerimos como industria fabricante de vehículos pesados”, dijo Elizalde en referencia a esta reforma eléctrica.
En marzo del presente año se produjeron en México 16 mil 40 vehículos pesados, lo que representa una caída del 0.53% en comparación con el año pasado, en tanto que la exportación cayó 6.01%, con 13 mil 127 unidades enviadas a otros países.
En contraste, las ventas al mayoreo y menudeo registraron una variación positiva durante el tercer mes del año; la comercialización al menudeo creció 21.91%, mientras que las ventas al mayoreo mostraron un alza del 38.95%.
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