Treinta y tres cámaras, confederaciones y asociaciones, hicieron un llamado a los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados, a considerar los argumentos de los sectores interesados antes de votar a favor de la iniciativa que prohibe la circulación de los tractocamiones de doble remolque o “fulles”.
Lo anterior, por la vía de un diálogo “en torno a cómo incrementar la seguridad vial en las carreteras del país a través de medidas como la efectiva supervisión y vigilancia”.
La descarbonización, capacitación a los conductores y el incremento en sanciones para quienes incumplan las normas que regulan la operación del transporte carretero, también serían tratados.
Si “fulles” ya no circularan…
Las cámaras, confederaciones y asociaciones ubicaron tres consecuencias de prohibir la curculación de “fulles”.
Primero: El parque de camiones en circulación, se duplicaría. El aumento en la demanda de combustible que esto traería consigo, tendría un impacto inflacionario por el incremento en precios del diesel asociado.
Segundo: El incremento del parque vehicular aumentaría las emisiones de CO2. Lo anterior, afectaría la calidad de aire.
Tercero: No disminuirían los accidentes viales.
La prioridad de los firmantes, es la integridad física de todos. Por lo que reiteraron que los “fulles” utilizados son modernos y con tecnología orientada a la seguridad vial.
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