La invasión de Rusia en Ucrania ha traído nuevos retos para las armadoras occidentales, que se suman las alteraciones en producción derivadas de la falta de componentes como microprocesadores, tal como es el caso de Volkswagen Vehículos Comerciales.
En un informe sobre su desempeño anual, la empresa con sede en Alemania dijo que la guerra en Ucrania genera incertidumbre y paros imprevisibles en la producción.
“Las plantas de VWVC se han visto directamente afectadas por la pérdida de algunos proveedores clave”, destaca la empresa.
Esta situación abona a los problemas que ya se tienen en cuestión de unidades entregadas, que en 2021 se entregaron 3% menos vehículos que el año previo, con un total de 359 mil 500.
“El impacto de la pandemia de coronavirus, especialmente las dificultades con el suministro de semiconductores, llevó el año pasado a que VWVC tuviera períodos de inactividad en la producción y que se entregaran menos vehículos”, dijo.
No obstante, Volkswagen Vehículos Comerciales destacó que se recibieron 100 mil pedidos más que las unidades entregadas.
En contraste con la entrega de unidades, la empresa vio una recuperación en cuestiones financieras “con un beneficio de 73 millones de euros, la marca vuelve a mostrar un resultado operativo claramente positivo”, dijo al tiempo que recordó los números rojos del año pasado.
En lo que se refiere a México, Volkswagen Vehículos Comerciales ha comentado en el pasado que espera crecer 40% en ventas, impulsado por su modelo Crafter.
Esto de acuerdo con Luis Rojas, director de la marca, quien destacó que se espera que Crafter represente el 36% de las ventas; seguía de Transporter, con el 35%; Amarok, con el 16%; y Caddy, con el 14%.
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